Collar De Proyección Personalizado

Hace unos meses perdí a mi perrita Luna, y desde entonces sentía un vacío difícil de explicar. Un día vi este collar con forma de patita y algo en mí supo que tenía que llevarlo. Le puse una foto suya dentro y, la primera vez que la vi proyectada, no pude evitar emocionarme. Es sencillo, bonito, y lo llevo conmigo todos los días. Me hace sentir que ella sigue cerca. Para mí, significa mucho más que un simple accesorio.

Mi perro Max estuvo conmigo durante 12 años, y cuando se fue, sentí que se llevaba una parte de mí. No suelo comprar cosas así, pero cuando vi este collar algo me hizo querer tenerlo. Le puse una foto de él y ahora lo llevo todos los días. No es solo un recuerdo, es una manera de sentirlo cerca. Me sorprendió la calidad y lo bien que se ve la proyección. Si has tenido una conexión fuerte con tu mascota, seguro me entiendes.

Adopté a Nala hace 7 años y fue mi compañera inseparable desde entonces. Hace poco falleció y no sabía muy bien cómo manejar su ausencia. Por casualidad encontré este collar y me pareció una forma muy bonita de mantenerla cerca. Le puse su foto favorita, y cada vez que lo veo siento paz. Es discreto, elegante y tiene un valor sentimental enorme. Es de esas cosas que no sabes que necesitas hasta que las tienes.